jueves, 10 de marzo de 2016

La Solidaridad Necesita de nuestro Corazón y nuestra Mente.

Caminando hacia nuestro 30mo. aniversario.
(Este artículo fue escrito por el Sr. Pedro Leong, un miembro del Staff de CRSS. Pedro reflexiona sobre los muchos cambios que se sucedieron en Casa Ricci desde la llegada del P. Ruiz a la isla de Da Jin en 1987).

"Dondequiera que se necesitan nuestros servicios, allí debemos ir!" Este es un concepto simple y directo para el servicio a los demás. El 8 de Octubre de 1987, el P. Luis Ruiz recibío una invitación del Gobierno de la Provincia de Guangdong para ir a un lugar desconocido, la isla de DaJin, para proporcionar cuidados a las personas afectadas por la lepra (PALs) que habían sido enviadas a vivir allí. Desde ese momento en adelante, el tiempo ha pasado tan rápido; ahora nos estamos acercando al trigésimo aniversario de nuestro servicio en la parte de China Continental.

Actualmente, nuestros servicios se han extendido a nueve provincias de China. La incidencia de la lepra se ha reducido; pero somos conscientes de la necesidad de atender a otros grupos y personas que también sufren discriminación y marginación. Así, CRSS ha ampliado sus servicios para ayudar a las victimas de SIDA, a los estudiantes que se encuentran con dificultades financieras, residentes de las zonas económicamente deprimidas, miembros de minorias étnicas o a las víctimas del comercio sexual.

En realidad, el nombre del P. Ruiz (o más bien, el P. Luk, en el dialecto local Cantonés) era muy bien conocido en Macao desde la década de 1950 hasta la década de 1980. Solía haber un dicho: "Algunos de los pobres en Macao pueden no saber el nombre de su gobernador, pero todos los pobres en Macao conocen el P. Luk!. Esto se debe a que el P. Ruiz hacía su trabajo con un enfoque práctico, combinado con calor humano. Su trabajo se convirtío en el estándar de calidad a la que todas las organizaciones de servicio y caritativas de Macao aspiran. Se ganó la confianza de muchas personas extranjeras y locales de buena voluntad, grupos, instituciones y entidades gubernamentales. Al enterarse de que su nombre estaba asociado a un proyecto en particular, ellos estaban dispuestos a unirse en asociación o en apoyo a esa actividad. Y luego estaban los que había recibido su ayuda en el pasado; también ellos seguían su ejemplo y participaban en varios servicios a la comunidad. 

En 1987, habiendo encontrado un sucesor para Caritas de Macao, la entidad que presta servicios de caridad en Macao, el P. Ruiz dedicó luego su tiempo y energía para atender las necesidades más grandes en China continental. En ese momento, trajo consigo un grupo de hermanas religiosas de la India para trabajar en la isla de Da Jin. Estas hermanas previamente habían trabajado con él en Macao.

Como dice la Biblia, "No hay nada nuevo bajo el sol". Los resultados positivos del servicio de la isla Da Jin condujeron a más pedidos de ayuda de los gobiernos locales de otras zonas. En respuesta a las numerosas peticiones, el P. Ruiz contactó a un número de congregaciones católicas de China continental para que voluntariamente ofrecieran sus servicios para el trabajo. Al mismo tiempo, CRSS también amplió sus actividades más allá de Da Jin, y poco a poco comenzó a establecer alianzas de trabajo con otras organizaciones del continente. 

Sin embargo, debe señalarse que, cuando CRSS empieza su servicio en China continental en 1987, el país estaba comenzando su proceso de reforma y apertura al mundo. En ese momento, el Gobierno daba la bienvenida a la asistencia y a los recursos del extranjero. Las leyes y las directivas relativas a las entidades extranjeras qu operan en el interior de China, y las agencias reguladoras responsables de su supervisión, estaban todavía en el proceso de establecerse. Por lo tanto, los procesos administrativos de solicitud, aprobación, y ejecución eran simples y directos. En estas circunstancias, el P. Ruiz, pudo ampliar rápidamente sus operaciones. En aquellos días, el principal obstáculo era la infraestructura de transporte, la administración de cuidados no era problema. 

Con el éxito de las reformas, China ha logrado una posición económica y política envidiable en la escena internacional. Sin embargo, al mismo tiempo, los procesos administrativos, y las leyes y los reglamentos, se tornan cada vez más codificados y complejos. Uno de los resultados desafortunados son las rectricciones cada vez mayores que se están colocando a las entidades extranjeras que operan en el interior del país. Ejemplos:

1)- 2001 - Reglamentos relativos a las organizaciones involucradas con el bienestar de los niños. 2)- 2006 - Reglamentos relativos a la prevención y tratamiento del SIDA. 3)- 2008 - (Prov. de Yunnan) Reglamentos relativos a la asistencia prestada a cuestiones afectadas por el SIDA - Huérfanos, pobreza de las familias, oportunidades de educación, etc. 4)- 2009 - Regulaciones temporales relativas a la ONG extranjeras que operan en el interior de la provincia de Yunnan. 5)- 2013 - Reglamento relativo al registro de las organizaciones comunitarias. 6)- 2014 - Reglamentos relativos a las organizaciones religiosas que cuidan a niños huérfanos y abandonados. Adicionalmente, pronto habrá nuevos procedimientos administrativos para tratar con las ONG extranjeras. En esencia, todas estas leyes, reglamentos y procedimientos presentan desafíos crecientes a la labor de servicio que nosotros, y nuestros socios de servicio, hacemos en el continente.

Sólo para tomar el Ejemplo #4 - regulaciones temporales relativas a las ONG extranjeras que operan en la provincia de Yunnan, una gran cantidad de tiempo y esfuerzo se gastó para proporcionar los datos solicitados (y los datos de nuestros socios) requeridos a fin de poder continuar nuestro trabajo en Yunnan, y que ha afectado seriamente nuestra prestación de servicios. En cuanto a los nuevos procedimientos previstos respecto a la supervisión de las ONG extranjeras, pensamos que los requisitos y restricciones futuras serán aún más exigentes.

El P. Fernando Azpiroz, quien comenzó a trabajar con el P. Ruiz, en 2005 y quien ha asumido desde entonces la responsabilidad de CRSS, enfrenta esta situación. Él es muy consciente de cómo estos reglamentos y procedimientos están afectando a nuestro servicio en China continental, así como el efecto desalentador que tienen en nuestras organizaciones asociadas y en los gobiernos locales. A fin de mantener la necesaria relación de confianza mutua, y mantener la cooperación con el gobierno, ya no es posible sólo confiar en el legado personal o la reputación histórica de Casa Ricci o el P. Ruiz. Una estrategia a largo plazo requerirá que todos los interesados compartan una misión común, un ideal común - para servir a otros.

En una de nuestras reuniones en 2013, definimos el espíritu de Casa Ricci de la siguiente manera: 

Defender la vida en medio de situaciones de muerte 
Crear esperanza en el medio de la desesperanza 
Recrear la dignidad junto a quienes han sido marginados
Derrotar a la discriminación, construyendo solidaridad.

El P. Azpiroz, tomó las palabras del P. Ruiz, "Dondequiera que se necesitan nuestros servicios, allí debemos ir!" y las adoptó para poder alcanzar la situación al día de hoy y sortear los retos actuales.

Al mismo tiempo, tenemos que aumentar la eficacia de la labor realizada por nuestras comunidades en los diferentes centros de rehabilitación. En el 2014, la Casa Ricci establecío el primer programa de formación para directores de esos centros. Para el segundo programa de capacitación en el año 2015, creamos una plataforma electrónica para que los diferentes grupos de servicios puedan intercambiar información y mensajes. Esto es para permitir que las diferentes comunidades de nuestra red puedan compartir información y sus experiencias de trabajo. En nuestra reunión de preparación del presupuesto del año 2016, el P. Azpiroz dio un paso más allá e insistió en la necesidad de hacer que nuestros servicios sean más locales, más estructurados y con objetivos mejor definidos, mas ajustados a los requisitos legales, y más profesionalizados. En verdad. la situación de China está cambiando, y nosotros intentamos adaptarnos a los cambios. Tenemos que fortalecer el compromiso de nuestros miembros con nuestro ideal de servicio. Esta es la ùnica manera en que podemos mantenernos firmes y afrontar los retos actuales.

Pedro Leong