domingo, 11 de enero de 2015

Los Médicos Oculistas de la unidad mobil visitan los hogares de los pacientes

Hace diez años atrás, el equipo de médicos oculistas que trabajaba en Guizhou Xinyi visito a los hogares de los pacientes que no podían acercarse a la clínica, nos encontramos con una pareja de avanzada edad quienes tienen ceguera bilateral.



El lugar en que ellos vivían era como un agujero oscuro, no podían caminar y estaban esperando morir en ese agujero. Examiné primero al Sr. Huang , su caso era muy complicado, su cornea estaba dañada. Creía que podía salvar el ojo con mucho cuidado utilizando el método ECC que es una gran incisión y extraer cuidadosamente la catarata. La otra bola del ojo había desaparecido. Los ojos de la señora Huang también estaban dañados. la cornea de un ojo había desaparecido, el otro ojo sufría probablemente iritis, así que tomé la decisión de hacer la cirugía a la pareja y darles esperanza. La operación salio bien, y les dí gafas de cataratas a ambos.

Ahora que han pasado diez años, volví a Xinyi para hacer unos trabajos dentales, me encontré con la pareja y ví que sus ojos ya están claros. Habíamos ampliado su vida por más de diez años. Las viejas gafas se rompieron, pero ellos las seguían usando. Tuve la oportunidad de darles nuevas gafas que yo había recibido de Hong Kong hace años y ahora no están disponible en China. Ellos todavía mantienen las viejas gafas porque son tan valoradas para ellos. Yo le dí a cada uno dos pares de nuevas gafas. Cuando se les alcanzaba las nuevas gafas, ellios decían “ya basta, basta” como si estuvieran dandonos a entender: “estos van a durar hasta el final que muramos”
 

Ahora la señora Huang se sienta en una silla mirando lo que hacemos en nuestra clínica dental. La Sra. Huang ya tiene la vista restaurada, pero todavía no tiene capacidad para caminar. A pesar de estos problemas, ella quiere comer carnes pero tiene solamente un diente. El Sr. Huang tiene gran preocupación y amor por su esposa, cada vez que llegamos a Xinyi, el le coloca a su esposa en un taburete para que mire. El Sr. Huang también tiene cierta discapacidad mental, lo cual hizo difícil nuestro trabajo, debido a esto no pudimos hacerle el molde, pero si la quitamos un diente.
En la próxima visita a la pareja, trataremos de nuevo a hacerle un molde.

Fuimos a Liangjiang XikangJang varias veces, y en la última vez vi a un hombre que estaba sentado a cierta distancia viéndonos trabajando. El hombre parecía muy tímido, yo me acerque y mire que tenía las gafas muy extraños. Sus gafas de cataratas se habían roto, tenía solamente una luna intacta. Él había sacado entonces la luna de las gafas de cataratas viejos y puso una cinta adhesiva para repararlos, de tal manera de pegarla a su ojo sin marco. Le pregunté, "¿por qué sus gafas están así?" Él fue muy tímido y avergonzado a decirme que él había roto las gafas, trato a menudo para encontrar las gafas parecidas en las tiendas pero no las encontró, y fue así que utilizo este método para pegarse una luna a su ojo con el fin de poder ver. Él no sabía que yo traje conmigo las gafas. Yo estaba feliz de darle dos pares de nuevas gafas. Se puso las gafas, se acercó a ver la televisión y se río con alegría.

Estas dos historias son el seguimiento de los trabajos de los ojos. Puedo chequear los ojos de los pacientes mientras trabajamos en la clínica dental y vemos el éxito de la cirugía de cataratas. He reemplazado muchas lunas dañadas por los pacientes en esta manera.

Aparte una historia triste. Esta vez es la segunda vez que fuimos a Sichuan, Dechang para la clínica dental. La primera vez hemos hecho un molde para el Sr. Ma, y esta vez habíamos preparado sus nuevos dientes. Sin embargo, él estaba enfermo, así que no podíamos hacer nada, y en cambio le llevamos al hospital y le dijimos que la próxima vez cuando regresaramos le encajaremos sus dientes, volvimos esta vez y encontramos que el Sr. Ma ya había fallecido y nunca llegó a disfrutar de sus nuevos dientes.
 

En Jiangxi, Fengcheng, el Sr. Fan tenía dientes extraños. Todos sus dientes estaban sueltos, y cada uno tuvo que ser extraído antes de que pudiéramos hacer el molde. Cada vez que íbamos le extraíamos unos dientes de el. Fuimos cinco o seis veces, finalmente, en la última vez, el dentista se quedo impaciente con este hombre y sus dientes sueltos, el dentista aviso que no le iba a extraer sus dientes hasta que el tuviera dientes artificiales, y esto era demasiado caro para el.

El Sr. Fan estaba muy desanimado y nosotros también, fue la última vez que estubimos en este lugar porque ya no podíamos venir de nuevo. Llamé a la clínica de piel de este pueblo y les sugerí que hagan los moldes y los dientes artificiales afuera. La clínica hizo como les sugerí y el Sr. Fan estaba tan feliz al ver su imagen nueva después de tener puesto sus nuevos dientes, ya que le daban un aspecto mucho más joven y más atractivo. También podía comer bien ahora.

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